El Centro de Investigaciones para la Educación, la Productividad y la Vida (Ciepv) de la UCAB en Puerto Ordaz dicta talleres en la región, para sensibilizar sobre técnicas sencillas y económicas de desinfección del agua de consumo, incluyendo la ebullición, cloración y desinfección solar (Sodis).
Carmen Urquía Ravelo, investigadora-docente del Centro de Investigaciones para la Educación, la Productividad y la Vida (Ciepv) de la UCAB Guayana.
Fuente: Prensa UCAB
Los representantes de la universidad recuerdan que, en la actualidad, esto es vital para reducir la propagación del coronavirus
El libro del Génesis dice que el mundo cobró vida gracias a un Dios que creó “un firmamento en medio de las aguas”. Este recurso natural es indispensable para la vida y un Derecho Humano, según la Asamblea General de las Naciones Unidas, 2010.
Para enfrentar la pandemia por Coronavirus (COVID-19), disponer de agua en los hogares tiene una importancia imperativa, considerando que una de las medidas más sencillas y de primer orden para la prevenir la propagación del virus, es el lavado frecuente de las manos con agua y jabón, así como las prendas de vestir y los alimentos, además de la limpieza del hogar, entre otras.
El 22 de marzo de cada año se conmemora el Día Mundial del Agua, decretado por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) en 1992, en el marco de la Conferencia sobre el Medio Ambiente y el Desarrollo, para llamar la atención sobre la importancia de preservar las fuentes hídricas, ya que, según la ONU, al menos 2.200 millones de personas en el planeta no disponen de agua segura para el consumo.
La Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) Extensión Guayana se une a esta campaña, que este año adquiere una connotación especial, no solo como día propicio para crear conciencia, sensibilizar y educar a las personas sobre la importancia del manejo adecuado del recurso hídrico; sino también para advertir que, en Venezuela, de acuerdo con datos aportados por Cáritas, 80% de la población no tiene acceso constante a servicio de agua potable.
“Es preocupante que son muchos los hogares, sobre todo en las comunidades vulnerables, los que no disponen de agua segura, con la calidad, cantidad y frecuencia deseada, y mucho menos de recursos económicos para comprarla; sin dejar de lado el jabón, que para muchos es también difícil de adquirir”, destacó Carmen Urquía Ravelo, investigadora-docente del Centro de Investigaciones para la Educación, la Productividad y la Vida (Ciepv) de la UCAB Guayana.
Sodis: el método más barato y eficaz para desinfectar agua
Bajo la filosofía “nuestras aulas son las calles”, la profesora Carmen Ravelo y su equipo de trabajo dictan talleres que buscan informar y sensibilizar sobre técnicas domésticas, sencillas y económicas de desinfección del agua de consumo, entre las que se incluyen la ebullición, la cloración y, especialmente, la desinfección solar del agua (Sodis, por sus siglas en inglés).
Botellas de plástico transparente, incoloras, de dos litros, bien limpias y mucha luz solar es todo lo requerido para aplicar el método Sodis. La desinfección del agua ocurre cuando actúan los rayos ultravioletas del sol y la elevación de la temperatura del agua, durante seis horas de exposición. Si el día está nublado, se repite el proceso un día más (ver detalles en la infografía).
A la fecha, los expertos del Ciepv han dictado 16 talleres en nueve unidades educativas del estado Bolívar, con un total de 540 personas informadas, entre niños, niñas, adolescentes, personal docente, madres, padres y representantes de las comunidades aledañas a los colegios. A todos también se les ofrece información práctica sobre manejo y almacenamiento adecuados del agua de consumo, además de medidas de higiene básica como lavar las manos con agua y jabón.
Asimismo, previo consentimiento, los expertos del Ciepv estiman la calidad microbiológica en los puntos de consumo en las escuelas y hogares de padres y representantes visitados, para determinar si cumple con las Normas Sanitarias de Calidad del Agua Potable.
La profesora Ravelo, quien es Doctora en Ciencias Biológicas, exhortó a los entes responsables del suministro de agua en la región y el país a poner este recurso vital al alcance de todos y, en especial, “atender la demanda de los menos favorecidos, quienes se encuentran en situación de vulnerabilidad debido a la pandemia por COVID-19”.
El Ciepv: un centro para la transformación social
Uno de los retos de la UCAB Guayana, a través de su Centro de Investigaciones para la Educación, la Productividad y la Vida (Ciepv), bajo la dirección de la doctora Aiskel Andrade, es precisamente promover, como centro de pensamiento, la investigación para la incidencia y la transformación en la región Guayana.
Enmarcado en este desafío, el Ciepv tiene la línea de investigación “Educación y Desarrollo Sustentable”, a través de la cual ejecuta el proyecto “Agua apta para el consumo humano”, con el objetivo de promover la utilización de métodos domésticos, sencillos y económicos, para el tratamiento del agua de consumo, su correcto manejo y almacenamiento, junto a la adopción de medidas básicas de higiene. Un programa activo de educación y sensibilización, dirigido a docentes, niños, niñas, adolescentes, padres y representantes es el vehículo con el que avanza la misión.
Aguas abajo, esta iniciativa contribuye con la disminución de la incidencia de la diarrea y otras enfermedades asociadas al líquido insalubre e higiene deficiente. También, el proyecto contribuye con la estimación de la calidad bacteriológica de este recurso en puntos de consumo; ello con la finalidad de determinar si cumple con los requisitos establecidos en las Normas Sanitarias de Calidad del Agua Potable (Gaceta Oficial de la República de Venezuela Nº 36.395, 1998).
Con el desarrollo y ejecución de estas investigaciones, la UCAB Guayana visibiliza la realidad social del guayanés y cumple con su responsabilidad de apoyar a la comunidad, a través de la generación y transmisión de conocimientos, para la prolongación de una vida sana y justa en nuestra casa común: el planeta Tierra.