La Junta directiva de la Asociación de Profesores de la Universidad Central de Venezuela, APUCV, denuncia que la compra del Centro de Estudio para la Vida (CEDIVI), realizada por la UCV, se realizó sin consultar a los profesores, y sin la transparencia necesaria.
Para la APUCV la verdad como valor institucional está siendo reiteradamente quebrantada por la máxima autoridad institucional
Según el análisis realizado por una Comisión designada por el Consejo Universitario existen dudas sobre el precio real de la operación y la supuesta adquisición de CEDIVI por intermedio de la Fundación UCV.
A juicio de la Rectora García Arocha el precio de la compra fue de $ 4.211.375,03 pero según los avalúos realizados su costo ascendía a $ 934.377,22. ¿Por qué se pagó entonces el monto antes indicado y que explica la magnitud de tal diferencia?
El informe de la Comisión la adquisición de CEDIVI contempla que se hizo “formalmente mediante una compraventa de las acciones de la sociedad mercantil propietaria de los bienes. Esa operación, “común en la práctica mercantil (…) sin embargo no tiene más que un precio simbólico, equivalente al valor en libros de las acciones que se adquieren y obviamente no contiene referencia alguna a los bienes que son el verdadero objetivo de la compraventa ni a la situación patrimonial de la empresa, incluyendo sus pasivos”
Llama la atención que de acuerdo al informe de la Comisión designada por el Consejo Universitario en la propuesta presentada para adquirir CEDIVI (…) no aparecían señalados todos los elementos esenciales y relevantes de la negociación, tales como el precio a pagar, el o los objetos precisos que iban a ser adquiridos, ni la forma concreta de la negociación” y sin “esa información -que no fue presentada al Consejo Universitario ni en esa sesión ni en un momento posterior, para su aprobación,- (…) no queda claro si la acogida acordada a la iniciativa tiene el valor jurídico de una decisión aprobatoria de la negociación. (aún no definida, para ese momento, en sus términos esenciales).”
Según la APUCV el Consejo Universitario no aprobó la compra de CEDIVI pues la agenda no contemplaba los elementos esenciales y relevantes para la negociación y, quien lo hizo, actuó sin que la opinión del Consejo tuviese el valor jurídico de una decisión aprobatoria, tal y como lo plantea la Comisión del Consejo Universitario.
Señalan que tampoco es cierto, como afirma la Rectora, Cecilia García Arocha, que la Fundación UCV compró CEDIVI en febrero de 2019 por $ 4.211.375,03. Lo que adquirió en esa fecha fue la totalidad de las acciones por un valor simbólico de 40 bolívares.
Para la Comisión del Consejo Universitario queda poco clara (…) la competencia del Consejo Universitario, el Rectorado o la Fundación UCV para administrar los bienes provenientes de la disolución de dicho FONJUCV.
El gremio ha sostenido que la competencia está contemplada en el artículo 27 del Reglamento de Jubilaciones y Pensiones del Personal Docente, que define su coadministración con dos representantes de la UCV, dos de la APUCV y un Jubilado electo.
Normativa que el Consejo Universitario se niega a cumplir.
Manifiestan que el Consejo Universitario debe explicar cuando autorizó cancelar 4.211.375,03 $, siendo que los avalúos indicaban un valor de $ 934.377,22 y en qué sesiones del Consejo Universitario se dio aprobación a los tres desembolsos que se realizaron.
Les resulta llamativo la rapidez de las transacciones pues para el 19 de junio ya se había realizado el primer movimiento Bancario, cinco días después el segundo y dos meses después ya se habían hechos todos los movimientos para la compra de CEDIVI, por ello solicitan al Consejo Universitario presente las actas de aprobación de cada una de esas erogaciones.
Para la APUCV la verdad como valor institucional está siendo reiteradamente quebrantada por la máxima autoridad institucional y el Consejo Universitario lejos de contribuir en aclarar la situación actúa oscureciendo los hechos ocurridos.
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